Como uno de los actos de rock más importantes de los años noventa, resulta bien interesante revisar el debut de Marilyn Manson pues fue la semilla de este gran monstruo audiovisual que creció fuertísimo y ayudó a rematar lo quedaba de siglo XX de manera espectacular, aprovechando que en la época, todo el terreno estaba abonado para el propósito.
Como muchos de ustedes saben, el concepto Marilyn Manson se crea alrededor de la idea de individuo que los Estados Unidos de América tenía preparada para las masas de infantes y jóvenes que día a día asistían al colegio y con la frecuencia indicada, al respectivo culto religioso. Como siempre ha sucedido en la historia de la humanidad, el plan no daría los resultados esperados con todos y, en el caso del joven Brian Warner (a quién esta idea "le entró en reversa") resultó particularmente contraproducente. Pero en todo caso, lo que se consideró contraproducente desde ésa perspectiva, es para mi y otros tantos en el mundo, motivo de admiración y como de costumbre, de celebración.
Por cosas de la vida, el joven Warner se encontraba en la Florida estudiando y trabajando como periodista musical y en ése oficio conoció entre otros, a sus compañeros de banda y al productor del álbum y amigo, Trent Reznor. Así las cosas, Portrait of an American Family fue creado por una banda joven, cuya alineación estaba todavía por definirse, pero que pudo concentrarse en lo creativo, mientras el ya experto equipo de Reznor se encargaba de las tareas técnicas (entre otros, Alan Moulder, Sean Beavan y Chris Vrenna, quienes hicieron parte del trabajo en la mansión Le Pig, donde se creó The Downward Spiral, siendo además el segundo disco lanzado bajo el sello Nothing Records de Reznor).
Portrait of an American Family es un álbum de rock (o metal) industrial, con el que la banda se hizo espacio en ése género de amplia tradición en Norteamérica, donde Ministry, White Zombie y los mismos Nine Inch Nails ya eran grandes. Ahora, aunque los tiene, en este disco ningún sintetizador, sample, programación o similar es protagonista. Esta música esta creada por una banda de garaje y los principales destacados son el bajo, la guitarra, la batería, el teclado y sobre todo, la prodigiosa voz de Manson que ya muestra todo su potencial. De aquella alineación, solo perduró como integrante fundador el tecladista Madonna Wayne Gacy (el calvo de chivera). Si bien el gran Twiggy Ramírez aparece como bajista de la banda en todas las imágenes (tras el carrito de mercado), en realidad se unió a la banda para la promoción del Portrait, pues en el álbum los bajos son acreditados a Gidget Gein, quien con el guitarrista Daisy Berkowitz (de gafas oscuras y tirantes) son los compositores de la mayoría de la música en el disco. Las letras son de Manson, por supuesto.
Este álbum es agresivo y enérgico, lleno de percusión fuerte y gritos con estilo. Entre los riffs de guitarra, bajo y teclado se escuchan momentos brillantes de ritmo o melodía que lo hacen muy atractivo. Berkowitz, Gein y Sara Lee Lucas (de candado y chamarra negra de cuero) le dieron un sabor muy particular al proyecto que nunca volvería a repetirse en Marilyn Manson, con tendencias del metal alternativo de la época y rock n´ roll clásico, que perfectamente se perciben en el excelente hit single e himno de aquella época, Lunchbox (video). El tema industrial por excelencia es Dope Hat, cuya música y video abren la puerta al increíble Smells Like Children (1995), álbum de remixes del Portrait con el que Manson alcanzó el estatus de estrella y sobre el que les hablaré maravillas el año entrante. Otra belleza es Get Your Gunn, sencillo que muestra el vasto poder de la banda. Entre mis favoritas también están Cake and Sodomy, Wrapped in Plastic, Dogma, Sweet Tooth, Snake Eyes and Sissies y, el cierre con la rockera Misery Machine. Mejor dicho, todo el disco.
Por su género y su propia particularidad dentro de la discografía de Marilyn Manson, Portrait of an American Family es un clásico que podrá interesar a los seguidores de muchas tendencias rock.
Feliz Aniversario!
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