Por: Santiago Rivas
Hoy, que escribo para celebrar el vigésimo cumpleaños de Maxinquaye, álbum debut como solista de Tricky, es necesario empezar hablando de Bristol, que no existiría para nosotros, de no ser por una escena, un núcleo creativo y un sonido que nos marcó como generación, pero que además ha sido replicado o plagiado muchas veces por grupos y artistas de todo tipo, seguidores alguna vez de los brillantes años del oscuro trip-hop. Es importante hablar de la ciudad, porque no se puede entender un disco tan retador al oído como el Maxinquaye, si no se hace un repaso breve a la historia.
Para empezar, el sonido de Bristol, nuestro bienamado trip-hop, no existiría, de no ser por la voluntad y recursos de Neneh Cherry, rapera, cantante, compositora y DJ, que empezó a financiar grupos de la escena y reunirse con artistas, como una mera colaboradora. Ella, que ha sido injustamente borrada de muchos reproductores de música, también ha sabido hacer trip-hop. Vale la pena que oigan, al menos, el álbum Man.
El álbum que hoy celebramos, no existiría si un año antes no hubieran aparecido Protection de Massive Attack y Dummy, de Portishead y de ellos también es necesario hablar. Portishead marca una tendencia de composición con más distancia del hip-hop, sin perder los elementos que los unen, como el scratch y el sampling, que es un elemento en común entre todos los participantes del sonido de Bristol. De hecho, Hell Is Round the Corner (video), pista 4 del Maxinquaye, comparte con Glory Box (video), pista 11 del Dummy, el sample de “Ike’s Rap II” de Isaac Hayes.
Por otro lado, Tricky fue miembro del Wild Bunch, el soundsystem que le dio vida a los Fresh4, grupo de rap en el que Tricky participó, y a Massive Attack, en donde Tricky fue colaborador frecuente. Protection es fundamental para el Maxinquaye, pues estos dos álbumes comparten un sonido, pero por encima de todo, dos letras: sus canciones Overcome (video) y Hell Is Round The Corner, tienen las mismas letras que él rapea en Karmacoma (video) y Eurochild de los Massive. No es solamente un préstamo hecho entre dos artistas, es una declaración sobre la manera en que se aplicaban en Bristol los principios del hip-hop.
El otro personaje del que es necesario hablar es de Martina Topley-Bird. Ella, que gracias a este disco se dio a conocer, era la novia de Tricky en ese momento y es quien hace las voces femeninas de todo el álbum. No es solo que su voz sea excelente, es que gracias a su registro, Tricky pudo dar al Maxinquaye una tendencia cercana al R&B, que no estaba del todo en ese lado de la música. La voz de Martina es dulce; contrasta con el sonido deliberadamente caótico de Tricky. Ese contraste, que aparece en cada uno de los grandes trabajos del sonido de Bristol, es en parte lo que le da un matiz tan empático al trip-hop, como un collage de contrastes que refleja el carácter de una generación y de una ciudad.
El trip-hop es un collage muy complejo, de todo tipo de vertientes. Una que es importante y a menudo se olvida es el post-punk británico. Aunque los códigos más claros del sonido de Bristol pasan por el hip-hop, el R&B y el dub, todos los artistas ingleses de los noventa habían pasado por los trabajos de The Cure, The Stone Roses, New Order, Joy Division y The Smiths, por nombrar solo algunos, que se convirtieron en la voz de todo un país, hastiados como estaban de aquella Gran Bretaña conservadora y opresiva, los años de Margaret Thatcher, cuyas políticas económicas dieron vida a la pobreza de muchos, como aquella pobreza que vio nacer a Tricky, hijo de Maxine Quaye, que murió cuando él tenía 4 años y cuyo nombre es el de este disco. Todo, por supuesto, está conectado.
El álbum, pista por pista, es una declaración de principios. En mi opinión, debería ser material de investigación sobre la forma en que debe hacerse un primer álbum. No importa si no es un álbum de trip-hop, porque Maxinquaye tiene mucho del trabajo necesario, muy bien hecho. Para empezar, el álbum toma prestados elementos de álbumes anteriores, está completamente conectado con su época, con su ciudad y con los artistas de su entorno. Cada canción es una atmósfera, un paisaje distinto. No en vano se llama trip-hop a este sonido. Todo el trabajo instrumental se convirtió en muestras, pero el trabajo de sampling no difumina el sonido en la electrónica. Es decir, está armado como una composición de instrumentos que no da prelación a la maquinaria ni a los sonidos prefabricados del computador (con los que se han hecho otros trabajos fantásticos, por supuesto). El álbum, además tiene uno de los mejores covers que yo haya oído, aunque muchas personas desconocen que el track 3, Black Steel (video), es una versión de Black Steel in The Hour of Chaos (video) de Public Enemy.
El caos que Tricky logra crear tiene un método. Es posible que su éxito radique en que se trata de un collage, efectivamente, hecho con todo lo que el tipo tenía a su alrededor, incluyendo a los productores, en donde encontramos a Howie B, responsable de sonidos en todos los matices de la música alternativa, Mark Saunders, que trabajó con The Cure en Wish, Kevin Petrie y él mismo. Puede que este éxito nazca de su capacidad para transmitir un carácter local, como es el de Bristol, para convertirlo en una tendencia que aún hoy es relevante y sigue creando émulos e influenciando músicos en todo el mundo. Pero sobre todo, creo que el patrón que le permite ordenar los elementos con los que configura un proyecto, un álbum con todas sus canciones, es la honestidad que solo se encuentra en la catarsis. Es decir, Tricky está hablando (o cantando, o haciendo Sprechgesang que es un punto entre las dos) sobre todo aquello que vivió y que conoce. No está inventando un mundo, está creando a partir de su experiencia y esa catarsis, ese rito de expiación, es la fuerza que hace tan grande su trabajo y que impregna cada tema y cada canción que sale de su estudio.
Tricky perfectamente habría podido quedarse como colaborador, rapero en un grupo, DJ o productor, pero su bagaje era distinto al de todos los demás en su escena. Ex pandillero, ex criminal juvenil, consumidor de drogas y pecador, en general, tiene una sensibilidad que ha sido capaz de reunir todo aquello que le rodea y que lo ha definido, para continuar abriendo su corazón en cada álbum. Esa honestidad, la versatilidad de su sonido y un compromiso inquebrantable con el sonido, su trabajo, su textura y todas sus posibilidades, son elementos que se encuentran en Maxinquaye y que definen al trip-hop como un género. O más, como un movimiento que no para, siempre vigente.
Y un detallito: desde Wikipedia con amor, la lista de canciones sampleadas en cada tema del álbum.
Disfruten:
Disfruten:
No. Tema Sample 1. "Overcome" "Moonchild" (Shakespears Sister) 2. "Ponderosa" "O Maa Tujhe Salaam" (Jagjit Singh), "Midnight Theme" (Manzel) 3. "Black Steel" "Rukkumani Rukkuman" (A. R. Rahman) 4. "Hell Is Round the Corner" "Ike's Rap II" (Isaac Hayes) 5. "Pumpkin" (featuring Alison Goldfrapp) 6. "Aftermath" "That's the Way Love Is" (Marvin Gaye), "Eat 'Em Up L Chill" (LL Cool J), "How Can I Be Sure" (The Young Rascals), "Let me tell you about my mother..." (Blade Runner) 7. "Abbaon Fat Tracks" 8. "Brand New You're Retro" "Bad" (Michael Jackson), "Mind Terrorist" (Public Enemy) 9. "Suffocated Love" "Look in My Eyes" (The Chantels) 10. "You Don't" 11. "Strugglin'" 12. "Feed Me"
1 comentarios:
...a pesar de que prefiero lo espeso, dislocado y patético de su 'Nearly God'. Este disco está más parado en la calle que ningún otro del trip-hop. Severa reseña (no sabía eso de Black Steel, esa canción tan 'dont give a fuck') Gracias.
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